martes, 21 de abril de 2015

9 HÁBITOS DE ALIMENTACIÓN SALUDABLE QUE NO ME HA COSTADO INTRODUCIR

Yo soy una de esas personas que no soportan llenarse de obligaciones que les estresen la vida. Ya me estreso yo bastante por mi propia naturaleza como para añadirme más pautas a seguir. Concretamente estoy hablando de las dietas y de la alimentación (aunque podría aplicarlo a casi cualquier cosa).

Eso no quiere decir que no me guste y le dé mucha importancia a alimentarme de forma saludable. Al revés, me parece básico y creo que es una parte fundamental de nuestro bienestar y de la prevención de enfermedades. 

Mi madre, que estudió Medicina y entiende de nutrición, ha intentado siempre que en casa lleváramos una alimentación saludable en la medida de lo posible. Tampoco nos vamos a poner radicales porque tampoco nos gusta, y mis hermanas y yo hemos comido bocadillos de Nocilla como cualquier niño, embutido, algunas chuches de vez en cuando (muy de vez en cuando comparado con la mayoría de la gente que conozco) o natillas de chocolate del súper de premio por acabarnos todo el plato de verduras. Pero por ejemplo en mi nevera nunca ha habido refrescos azucarados a diario, nunca hemos tenido bolsas de patatas fritas en la despensa, ni bollería industrial para merendar. Mi madre evitaba tener en casa "alimentos-porquería" y así los reservábamos para findes y ocasiones especiales.

Así que conste que, más o menos, he llevado una alimentación adecuada sin suponerme ningún sacrificio (bueno... comer verduras no cuenta... aunque ahora he descubierto cómo cocinarlas para disfrutarlas).

Pero luego, ahora ya de más mayor, he leído cientos y miles y trillones de consejos de alimentación saludable, y son tantos, tantas rutinas que tendría que introducir si quisiera cambiarlos todos... Casi como mi abuela siguiendo al pie de la letra los tips de Saber Vivir ;) Y aquí voy con eso de que no me gusta presionarme con obligaciones y llenar mi vida de pautas. No me gusta sobre-organizar mi vida, así que simplemente busco quedarme con aquellos hábitos que no me suponen un esfuerzo, que me permiten vivir sin obsesionarme pero sabiendo que me estoy alimentando bien.

Por eso en este post voy a compartir contigo los hábitos sanitos que no me ha costado nada introducir en mi alimentación, que son ya una parte automatizada de ésta y que me hacen sentir mejor.


Los hábitos de alimentación sana que NO me ha costado introducir

  • Cambiar la leche de vaca por leche de avena. Había leído ya bastante sobre lo perjudicial de la leche de vaca (por ejemplo en este post de Deb, de su antiguo blog Dumbo, que está súper bien explicado, también en La enzima prodigiosa y varios más). Sentía que, aunque me encanta y la adoro, no me acababa de sentar bien y me hinchaba la tripa mucho, así que decidí empezar a probar las bebidas vegetales. La de soja me gusta, pero leí también alguna cosilla que alertaba sobre ella, así que después de probar muchas otras (almendras, arroz, alpiste, avena) me quedé con la de avena. Ahora me gusta tanto con café como con cacao -el mío es de Comercio Justo- y es la que tomo siempre. Aunque cuando salgo por ahí me pido cafés con leche normal sin ningún problema y cuando se gasta la de avena en casa, bebo de vaca y me doy el caprichito. Recuerdo: radicalismos y obsesiones no.
Mi favorita, ecológica, de Soria Natural (la puedes encontrar en herboristerías, ecotiendas, ecomercados o redes de consumo ecológico).

  • Cambiar el azúcar por la stevia. Esto no me costó nada porque me gusta el sabor que da la stevia. Al principio puede recordar un poco al regaliz. En la leche con café o con cacao apenas noto diferencia y en las infusiones le da un toque que me encanta. Me he acostumbrado tanto, que en casa es lo único que uso. Yo la compro en una red de consumo ecológico y la he probado tanto líquida como en pastillitas. Otra opción es el sirope de ágave, dulce y que quizá se parezca más al sabor azucarado que buscas. Mi chico se ha vuelto adicto y va genial para las tortitas o los yogures.
Ésta es la stevia líquida (ecológica) que tomo yo.

    Y ésta, también de la marca SteSweet, en comprimidos.
    Sirope de ágave ecológico de NaturGreen.

  • Introducir la quinoa y el cuscús. Esto ha sido un enorme descubrimiento porque ¡¡¡me chiflan!!! En ensaladas (taboulé), con verduritas... hay mil opciones y están <3

Quinoa ecológica de El Granero. El couscous lo compro de la misma marca.

  • Sustituir la pasta, arroz y harinas refinadas por integrales ecológicas. No noto la diferencia. Importante que los alimentos integrales sean ecológicos puesto que estos alimentos conservan completo el grano y la cáscara, que es a donde van a parar los herbicidas y pesticidas en la agricultura convencional. Yo uso mucho la marca EcoLécera, que además es de aquí cerquita. ¿Harinas? De avena, de espelta, de garbanzos...
Pasta integral de EcoLécera.

  • Comer más verdura. Eligiendo la que me gusta y cocinándola como me gusta. Soy muy rarita para las verduras (las texturas me ponen mala...), pero he descubierto la forma en que me encantan. Cremas (calabacín, calabaza, zahahoria+puerro), ensaladas (los vegetales crudos son los que mejor conservan sus propiedades) y hortalizas asadas o a la plancha (calabacín, berenjena, pimientos, espárragos trigueros...). También hay verduras como la coliflor o las habas con las que no tengo problema. Hago unos tallarines de calabacín con pesto rojo que están de muerte (si queréis la receta pedidla). Y los pimientos rellenos de espinacas con bechamel y gratinados de mi madre son de otra galaxia <3
  • Comer algo de fruta. Básicamente eso porque casi no como, no me acaba de gustar, nunca me apetece y me da pereza. Así que la como en guacamole o tostaditas (el aguacate), en zumos de naranja que me flipan o en batidos, mi gran descubrimiento porque me tomo 2 frutas en un momento. Si queréis un post con mis recetas de batidos dejádmelo en comentarios y lo haré.
  • Introducir la cúrcuma y la pimienta. La cúrcuma es un potente anticancerígeno y mezclada con pimienta aumenta muchísimo su efecto, así que ahora las hecho en un montón de cosas (en las cremas de verduras dan un toque buenísimo). 
  • Tomar té e infusiones. Bah, no me cuesta nada porque los adoro y me sientan de vicio. Para las digestiones, para las tardes frías, para antes de dormir... Mi favorita, la de Yogi Tea Mujer.

  • Reducir refrescos carbonatados azucarados. Al no tener nunca en casa, no estoy enganchada. Cuando salgo a tomar algo suele elegir cafés con leche, tés (calientes o fríos: en el bar donde voy siempre hacen un té con limón frío casero buenísimo) o infusiones. A veces algún zumo aunque sé que llevan azúcar a cascoporro!! Y he descubierto en las tiendas Taste of America las bebidas orgánicas Little Miracles, que son té frío con diferentes zumos de frutas, energizantes, y estoy deseando volver a Zaragoza para hacerme con otro lote. Cuando salgo de fiesta suelo beber cerveza o vino, pero me tomo mis copas con refrescos como todo el mundo!

Mis adorados Little Miracles.


Yyyy estos son todos los hábitos que no me ha costado apenas nada introducir. Lo más costoso es localizar tu sitio donde comprar ecológico y que salga bien de precio. Si queréis que os hable de las redes de consumidores me lo decís en los comentarios y haré un post sobre ello.

Y a ti ¿qué hábitos de alimentación saludable no te suponen esfuerzo ni te añaden presión?

10 comentarios :

  1. Lo de la leche yo tb lo estoy pensando... Yo tomo desnatada sin lactosa para hacerme los "colacaos", porque realmente la leche en si no me gusta. También he leido ultimamente los contras de tomar leche y realmente es cierto que bien bien no me sienta (me produce pesadez de estómago, gases, digestiones pesadas...). Estoy pensando en la de arroz o almendras... Pero me da cosilla cómo quedará el sabor del colacoa con eso... (lara)

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    1. Lara, yo te recomiendo la de avena porque es la que más "dulcecita" me parece (me la tomo con stevia), pero si pruebas ya me contarás con cuál te quedas!

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    2. Probaré a ver qué tal y ya te contaré ;)

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  2. Muy bien! Nosotros el otro dia probamos la de espelta y está buenísima. Lástima que los precios... sean tan caros! en cuanto a harinas ecomonegros es otra opción para comprarlas. Si alcahueteas un poco por internet, verás como hacer leche de arroz y de avena tu misma es fácil, otra cosa es encontrar el punto de sabor, pero bueno... probando.... probando... El mijo con verduras también está muy bueno.
    Mi siguiente paso es cambiar el azucar por stevia. ya que la sal ya hace tiempo que la compro sin refinar. 1saludo.

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    1. Se me olvidó poner que también he sustituido sin ningún problema la sal refinada por la marina, es verdad!
      Y muchas gracias por todas las otras recomendaciones!!
      En cuanto a los precios sí, es una pena, creo que conforme se vaya extendiendo más la alimentación ecológica entre la población, podrán bajar precios. Pero de momento a nosotros lo que mejor nos sale es comprar en la Red de "La huerta en casa" :)

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  3. Comparto casi todos estos hábitos que he ido incluyendo en mi día a día desde principio de año y la verdad es que estoy encantada. No me ha costado nada y todo son ventajas! Quiero la receta de tallarines de calabacín con pesto rojo, please! :)

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  4. Opino cómo tu, no hay que ser radical, si algún día tomas leche de vaca o un refresco no pasa nada, pero reconozco que desde hace un año que sólo tomo bebidas vegetales y mucha más fruta y verdura ( sumado a que dejé de fumar, cambio de vida radical)

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  5. Y notó un cambio enorme, lo más significativo es que casi no me resfrío y las digestiones mucho más ligeras. Un beso

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    1. Jo, pues sí que has hecho cambio. Tu cuerpo lo habrá agradecido un montón.
      Y eso, nada de radicalismo y caprichitos de vez en cuando son bienvenidos!!

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